jueves, 4 de noviembre de 2010

¿Protegida o en mi propia prisión de 4 paredes?


Pensaba que entre 4 paredes podia aparentar que todo está bien,que no hay preocupaciones, que no hay ningun problema...

Pero, ¿a quién quiero engañar? Parece que solo conseguí engañarme a mi misma evitando lo evidente. Escondiéndome de sentir, de mis miedos,...y sin darme cuenta llevaba demasiado tiempo más muerta que viva.

¿A qué tienes miedo? ¿A ser feliz? ¿A sufrir? ¿A equivocarte? ¿A lo desconocido? ¿A lo nuevo? ¿A la experiencia? ¿A amar? ¿A ser traicionado? ¿A críticas?

La vida no está hecha para los cobardes, a no ser que prefieras apartar la vista y hacer como si nada pasara. Sería lo más propio de ti.

¡Basta ya! ¡Despierta! ¡Reacciona! No puedes seguir así, estas perdiendo algo muy valioso... el TIEMPO. ¿Por qué digo que es valioso? Porque los segundos van pasando, los minutos, las horas, los días,...y nunca se detiene. No se detiene por nada ni por nadie. Pero tienes la opción de elegir, puedes seguir desperdiciándolo y el día que mueras te arrepentirás de no haber vivido. O puedes despertarte, levantarte y alzar la cabeza por encima del abismo y arriesgarte y el día que mueras podrás decir feliz que tuviste una vida.


Ya llegó mi hora de despertar, de salir de la prisión en la que yo misma me encarcele por miedo, por temor a vivir y sentir.


¡Se acabo! No me puedo permitir esconderme cuando aun no he empezado a vivir, no puedo seguir con la cabeza agachada. Llegó la hora de alzar la cabeza y mirar al frente.



La vida es demasiado bella para pasar desapercibida, solo hay que saber apreciarla.